Girasol, que busca un rayo de luz.
Mariposa que desea volar.
Eva, que desea morder la manzana del pecado.
Engranaje que no termina de encajar.
Niña que llora porque su juguete se ha roto.
Todo eso, soy yo.
miércoles, 22 de diciembre de 2010
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Pues contestando un poco al comentario anterior del anónimo: yo no lo veo tan malo. No es que sea una obra para premio, pero es una forma interesante por diferente, de describir una forma de ser o quizás un estado de ánimo.
ResponderEliminarEs solo mi opinión, claro.
Gracias al anónimo por la crítica. Intentaré mejorar
ResponderEliminarÁngel, Carmen, no hagáis caso a los anónimos, sobre todo los mal escritos.
ResponderEliminarEste poema es un iceberg, tiene mucho más bajo sus versos de lo que puede verse.
Todo está frente a tus ojos, pero no todos consiguen verlo: depende del punto de la perspectiva con el cuál mires.
ResponderEliminarPara ser mariposa, primero has de ser un capullo. Con el tiempo aprendes a volar y convertirte en una preciosa mariposa, llena de energía y colores que hacen deslumbrar todo lo que te rodea.
Corto... pero intenso ;)