Un poema de Julio Martínez Mesanza que me han entrado ganas de recitar:
ASEDIO
Sus torres arderán como si fueran
secas espigas. Caerán sus muros.
Es mucha su jactancia, y excesivo
su orgullo. No conoce el latigazo
de la enorme ballesta, ni conoce
el hambre que no acepta ley alguna.
Polvo será en el polvo del desierto
y de su honor no escribiremos nada.
No puede haber honor en quien se esconde tras altas murallas con el solo propósito de defender su jactancia y su orgullo desmedido. El honor se forja en el dolor y el sufrimiento después de haberles vencido.
ResponderEliminarY polvo es y su sitio es el desierto.
Me gusta el poema y mucho como lo recitas.
Enhorabuena Álex.
Saludos.
Gracias. Estaba escuchando una canción de Globus y dándole vueltas a ciertos temas y me di cuenta de que nada deseaba más en ese momento que recitar este poema. Encajaba perfectamente con la música y el sentamiento que me asaltaba.
ResponderEliminarUn saludo.