Un día la miras,
y sus ojos no te dicen lo mismo.
No es que estén apagados
o se hayan distraídos,
es que se encuentra en una esfera distinta.
Eso es lo que deben llamar olvido,
y que tú dices,
mi mujer me mira con otros ojos.
Ahora ella no sabe de qué se ríe,
ni a dónde vas cuando dais un paseo.
No recuerda quien fue en esta vida,
ni el importante papel que contribuyó
en la creación de vuestra familia.
No sabe que sus hijos
van a verla algunos domingos,
ni recuerda por que un niño pequeño le dice abuela.
Te mira desde otra dimensión,
pero sabe que eres tú
aunque te llame de mil maneras distintas,
la persona que le esta queriendo, mimando y cuidando,
como si fuera el primer día…
Un día la mías,
y sus ojos no te dicen lo mismo.
Ya no tiene recuerdos,
pero tú a cada instante le cuentas quien eres,
a base de besos.
Alzhéimer, una carrera contra el tiempo y el olvido.
Rocío Cáceres.
Rocío Cáceres.
Me ha gustado bastante este poema Rocío :)
ResponderEliminarPrecioso Rocío, enhorabuena! Casi suelto una lagrimilla... me ha gustado mucho el tono positivo que le has dado a este problema. Un muxutxu!
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMuy bonito, Rocío. Mi abuela sufre Alhzéimer y me he sentido ahí, con ella.
ResponderEliminarGracias por este bello homenaje.
Besos.
Víctor.
Muchas gracias Victor y David. Aosicacion Di-fusion-a2 Manifiesta tu identidad!!!
ResponderEliminarBesos
Cada vez escribes mejor. Si es que tu todo lo sabes hacer. Un besito.
ResponderEliminarMaite Zaitut.
Laura